Un día después de que Shell y AXION Energy incrementaran los precios de sus combustibles, YPF, que anunció que no aumentaría los valores, se dispuso a actualizar el precio de sus productos en un porcentaje semejante al del resto de las empresas de combustible.
YPF había resultado la primera en ajustar sus valores en anteriores oportunidades, esta vez hubo un cambio de planes con esta suba tardía de los precios del gasoil y la nafta.
Si bien YPF se había pronunciado por no incrementar los precios de sus productos, la gran demanda que hubo durante el domingo, sumada al limitado stock existente, hicieron que la empresa deba replantearse la medida de mantener sus precios y seguir los pasos de las otras petroleras.
La presión de los expendedores también fue determinante, advirtieron acerca de la difícil situación económica que atraviesan por los precios atrasados, a contramano del alza de los costos operativos y las nuevas escalas salariales.
Esta es la tercera suba en lo que va del año, la última había ocurrido el pasado 14 de marzo, cuando los productos tradicionales treparon 9,5% y 11,5% los de categoría Premium. Según explican en el mercado, la decisión responde a la evolución de las principales variables que conforman el precio de venta al público, sobre todo de la cotización internacional del petróleo y los niveles de demanda superiores a la prepandemia, que requieren importaciones para complementar la oferta local.
