Este 70% interanual del gasto del Estado, significan $922.314 millones en el segundo mes de este 2022, mientras que la inflación superó el 52%. Es decir que la aceleración del déficit trae consigo un salto del 306% en lo que respecta a términos nominales anuales.
La mayor parte del incremento en las erogaciones totales tienen que ver con el aumento del 60.5% en las jubilaciones y pensiones contributivas, representando más de un tercio del total. Desde la cartera de Economía explicaron que “el impacto de la fórmula de movilidad vigente (Ley N° 27.609), que arroja actualizaciones en línea con la recuperación de la recaudación y los salarios de la economía".
Tras los aumentos de las paritarias, los salarios también indicaron una trepada del 74% aproximadamente, esto sumado al pago adelantado de remuneraciones por los feriados de carnaval.
Si hablamos de subsidios energéticos, este ítem tuvo un salto del 94,4%, siento uno de los puntos más críticos del debate por la reducción del déficit fiscal.
El 15% de la variación con respecto al año pasado, en parte se explica por los $50.000 millones adicionales de gasto en programas como: Potenciar Trabajo, PROGRESAR, PreViaje; también en políticas alimentarias y en asignaciones familiares.
El director del Instituto Argentino de Análisis Fiscal, Nadin Argañaraz, detalló: “Si bien la ejecución de las cuentas fiscales no es lineal, se puede señalar que dicho déficit primario equivale al 41% de la meta para el primer trimestre según el acuerdo con el FMI y sólo al 5% de la meta anual".
Por su parte, el IVA mostró un incremento del 66,6%, lo que equivale a $59.461,8 millones. En tanto que las retenciones subieron en un 53,2%, es decir $32.882,7 millones.
Finalmente, el pago de intereses de la deuda pública fue de $60.615,3 millones, arrojando como resultado un déficit de $136.898,8 millones.