Luego de conseguir la medalla de plata con Las Leonas la salteña Valentina Raposo llegó a Salta en donde fue recibida en el Aeropuerto Martin Miguel de Güemes por el Gobernador de la Provincia de Salta.
Posteriormente Valentina fue llevada en una autobomba por las calles de Salta siendo escoltada por miles de salteño que querían saludarla, hasta llegar a la Universidad Católica.
Raposo se metió en la historia grande del deporte salteño, siendo la primera medallista olímpica de la historia con sus cortos 18 años, y además se convirtió en la segunda Argentina más joven en colgarse una medalla olímpica.